
En entradas anteriores, hemos abordado el factor capital con los activos no corriente y corriente.
En esta ocasión, hacemos referencia al factor trabajo, que no es otro que el plan de recursos humanos. Con el que vamos a ver las tareas que van a realizarse para el desarrollo de nuestro de nuestro negocio, las cuales determinarán la organización de la empresa así como los puestos de trabajo necesarios para llevar a cabo esas actividades.
Una vez seleccionados los empleados más adecuados, procedemos a firmar el contrato que más se ajuste a las necesidades del puesto y de la empresa y a su afiliación o alta en la Seguridad Social. Los distintos aspectos que derivan de la contratación como la cumplimentación del modelo 145 o la confección de las distintas nóminas es todo lo que recogemos a continuación.
Esperamos que os ayude, ¡un saludo!
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